Si usted está interesado en comprar una vivienda tiene que saber que el mejor momento para hacerlo es ahora. Esto se debe, principalmente, a dos factores: los bajos tipos de interés que favorecen las condiciones de financiación y los precios de los inmuebles que se encuentran todavía estables ante el pronóstico de que empiecen a subir progresivamente.
La situación derivada de la pandemia ha generado un repunte de las ventas, ya que la compraventa de inmuebles se ha visto impulsada por unos tipos de interés bajos y por los cambios en las necesidades de los compradores, que buscan satisfacer nuevas necesidades, sobre todo en zonas residenciales con viviendas más amplias, luminosas y en muchos casos con terrazas o jardín.
La recuperación económica, los bajos tipos de interés y la previsión de que vayan a subir los precios hacen que el contexto actual sea favorable para adquirir una vivienda.
A pesar de la recuperación económica, los futuros propietarios deben estar atentos a la evolución de los precios de la vivienda, que puede ir al alza en los próximos años, al igual que los tipos de interés, sobre todo si la inflación continúa subiendo, lo que puede afectar a la recuperación económica y derivar en una subida de los tipos de interés.
Llegados a este punto se nos puede plantear la duda de si optar por una vivienda de segunda mano, o adquirir una vivienda de obra nueva. A la hora de tomar la decisión valora los posibles ahorros que supone desde el punto de vista energético y las calidades superiores, así como que en la vivienda primen los espacios más amplios, terrazas, jardines y zonas comunes.